La educación no es algo inventado a lo largo de la historia, sino "un factor inherente a la vida del hombre, tan inherentemente unido a éste que sin ella no podría subsistir. Por otra parte, la educación constituye un elemento integrante de la sociedad humana como puedan serlo el lenguaje, el derecho, el arte o la ciencia, y necesita igualmente de ella para su conservación y desarrollo. La educación es así una función humana, vital, autónoma y como tal tiene sus normas y leyes propias". 1
Todos los seres humanos fuimos creados con un propósito, con talentos y dones únicos y especiales; dotados así para vivir en un ambiente en el cual unos a otros nos complementemos y ayudemos. Muchos educadores así lo han confirmado a través de su experiencia al educar, por citar a la Profesora Maria Nieves Pereira, al interpretar a su maestro Pierre Faure:
"Faure se encuentra entre los que afirman que el hombre lleva en su interior grandes respuestas que sólo necesitan ser invocadas para hacerse manifiestas, porque el hombre es infinitivamente capaz".2
Esa infinitividad proviene de nuestro creador que nos hizo a su imagen y semejanza. La educación en el hogar constituye una acción que gran cantidades de padres han tomado para que con amor y dedicación, nuestros hijos desarrollen tales habilidades.
Soy maestra por profesión y trabaje duránte algunos años en el sistema escolarizado y no se compara para nada a ala educación en el hogar, es diametralmente lo opuesto. ¿Porqué? porque el proceso de institucionalización del que habla Peter Berger ( en su obra Modernidad, Pluralismo y Crisis de Sentido) es muy fuerte en la escuela en muchos paises como en México. Ese proceso lleva a los profesores a trabajar por un salario (no generalizó) y por una capacitación para el aumento de este, la escuela en México se reduce a meros lineamientos cuadrados a seguir, a llenados de informes, etc... y los humanos sus diferentes capacidades, sus inteligencias multiples se dejan de lado.
Todos los niños son diferentes incluive anatómicamente, y se crea un lineamiento a seguir para que todos sean medidos bajo los mismos estandares, examenes iguales para todos. ¿Y sus diferentes dones? ¿Y sus capacidades diferentes? ¿Y sus inteligencias multiples? ¿No se han dado cuneta que mientras que uno de tus hijos aprendió a hablar antes del año, el siguiente no hablo hasta los dos años, y que decir del niño que tiene una capacidad extraordinaria para la musica pero la Biología es para el un completo tormento? ¿Quién mejor que los padres para saber desarrollar en cada hijo sus dones, habilidades, talentos mientras desarrollas el poder emocional para que ellos puedan ser responsables de lo que dicen, sienten y hacen?
Yo por eso educo en el Hogar y no es nada fácil. Para nada.
[2]L. Luzurriaga, La educación nueva, Losada, Buenos Aires, 7a ed., 1964, pag. 13.
[2] Pereira María Nieves, 1996, Educación personalizada: un proyecto pedagógico en Pierre Faure, Trillas, quinta edición México, pag. 24
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